miércoles, marzo 03, 2010

en el bunker

Cuerpos
hechos en casi el mismo telar
frotan, saboreanse
como si quisieran recuperar la madeja de hilo madre de donde surgen
bucean en el mismo tinte, en el cielo de estrelas lunares.

Cuando el silencio truena y rompe vidrios, estos gritan
y lloran de alivio
porque la voz está vetada
la palabra es absurda, por fin.
bienaventurados los entes
que escuchan los litros del vecino
mar que ruge y rebienta en mensajes
que se ocultan en algas y escudos
en suposiciones e ideas ancianas
veteranas que no jubilan, frazadas de vidrio.

Clima multipolar
ritalin, carente de estabilidad.
Temporada de contaminacíon acustica (que asusta)
el látigo de este sujeto caballo que corre sordo.

Al horizonte, que lejanon se veía, llega a patalear y nadar en pasto
se oxigena y mira de nuevo con claridad y razón.
Reclama esos ojitos que bajo truenos miraba metaforeándose en
felices arenas movedizas, que te tiran de la ropa,
te sacan los zapatos para hablarle al pulgar
hablan a las sillas de cocina que pierden la virginidad

Así es el cielo y el choque de masas de aire
gotas de agua impredecibles
mordiscos que caen como escupos de azoteas
frutas de tercera edad que se lanzan colina abajo.
Un pirata las agarra con su garfio hambriento
una nuca distraída las recepciona
y la holografica culpa no es del viejo cielo

Eso entona el colchon
que se niega a ser sepulturero de una muerte descuidada
de una vida olvidadiza que durmio sin exhalo
Eso niega la almohada, rechazando ser paño de mucosa